Yoga de escritorio para aguantar el día

¿El trabajo de escritorio te tiene adolorido? Prueba el yoga de escritorio para ayudarte a mantener tu cuerpo flexible y con energía.

WELLNESS | MEDITACIÓN

El yoga de escritorio es una gran opción para mantener los niveles de energía durante la jornada laboral. Trabajar desde casa puede ser duro y es fácil perderse en el ajetreo del día, y no siempre tienes tiempo para un descanso. El yoga es una forma estupenda de mantener la energía sin dejar de hacer tu dosis diaria de ejercicio. Aprende cómo puedes practicarlo en tu propio espacio de trabajo.

¿Qué es el yoga de escritorio?

El yoga de escritorio es un tipo de ejercicio diseñado específicamente para quienes quieren hacer yoga sin tener que abandonar su zona de trabajo. Consiste en estiramientos, ejercicios de respiración y otros movimientos que pueden realizarse sentado o de pie cerca de tu escritorio. El objetivo es aliviar la tensión muscular y la fatiga mientras te mantienes concentrado en tus tareas laborales

Beneficios del yoga de escritorio

Los beneficios de hacer yoga de escritorio son numerosos. Para empezar, ayuda a reducir el estrés y la ansiedad al permitirte concentrarte en los ejercicios de respiración y los movimientos conscientes en lugar de preocuparte por las tareas del trabajo. El yoga de escritorio también fomenta una mejor postura, lo que ayuda a mantener la columna vertebral sana y evita el dolor de cuello y hombros provocado por dolencias relacionadas con la mala postura, como encorvarse o encorvarse sobre el teclado todo el día. Por último, aumenta la circulación en todo el cuerpo para que puedas mantenerte alerta y con energía durante toda la jornada laboral

Cómo hacer yoga de escritorio

¡Hacer yoga de escritorio es sencillo! Todo lo que necesitas es un poco de espacio alrededor de tu escritorio, o incluso suficiente espacio delante de él, para moverte libremente sin golpear nada ni a nadie. Empieza por inspirar lentamente por la nariz y espirar por la boca varias veces hasta que te sientas relajado. A continuación, intenta realizar algunos estiramientos básicos, como giros de cuello o encogimiento de hombros, mientras sigues respirando profundamente durante los movimientos. También puedes hacer círculos con los brazos o elevaciones de piernas mientras estás sentado, si no hay suficiente espacio a tu alrededor para hacer estiramientos de pie. Recuerda que debes ir a tu propio ritmo; ¡nadie debe forzar posiciones incómodas durante el yoga de escritorio!

Paso 1

Respira profundamente tres veces y relájate. La respiración está estrechamente relacionada con tu sistema nervioso, así que mantener una respiración rítmica y tranquila puede ayudarte a sentirte mejor mientras la mente se despierta

Paso 2

Cierra los ojos e inclina la cabeza hacia la izquierda, manteniendo el pecho levantado. Imagina que respiras en el lado del cuello como si crearas espacio aquí dentro de ti mismo, repite en el lado derecho.

Paso 3

Entrelaza los dedos de las manos detrás de tu cabeza y comienza a levantar tu esternón hacia el cielo. No dejes caer la cabeza demasiado hacia atrás. En cambio, usa tus manos para alargarte desde la parte posterior del cuello.

Paso 4

Coloca la mano derecha en el exterior de tu pierna izquierda para un estiramiento lateral sentado. Levanta el brazo izquierdo, gira la cabeza hacia la axila e inclínate hacia la derecha. En lugar de comprimir el lado derecho, piensa en alargar tu lado izquierdo. Repite hacia la derecha.

Paso 5

Gira a la izquierda y a la derecha sentada. Ten cuidado de mantener el pecho levantado mientras lo haces.

Paso 6

Bosteza. Al hacerlo, ayudas a tu cerebro a restablecerse; de ​​hecho, cuando bostezas, en realidad estás estimulando un área neuronal del cerebro que desempeña un papel importante para estar más consciente y alerta (aunque también relajada).

Paso 7

Entrelaza los dedos y estíralos hacia el cielo (incluso cuando no puedes ver más que una luz blanca de oficina, el cielo está allí).

Paso 8

Mueve circularmente los tobillos y mueve los dedos de los pies, puede que no pienses que eso tendrá mucho efecto en tus niveles de energía, pero ayudará a estimular la acumulación de sangre venosa en la planta de los pies y, por lo tanto, elevará tus niveles de energía en general.

Intenta repetirlo cada 45 minutos, pues de acuerdo con varios estudios, este es el tiempo que el cerebro humano puede permanecer completamente concentrado.

El yoga de escritorio es una forma fácil de mantener la energía durante la jornada laboral sin tener que salir de tu espacio de trabajo. Ayuda a reducir el estrés, a mejorar la postura, a aumentar la circulación del cuerpo y te mantiene concentrado en los movimientos conscientes en lugar de preocuparte por las tareas del trabajo. Así que la próxima vez que te sientas perezoso en la oficina, considera la posibilidad de tomarte unos minutos de tu día para hacer algunos estiramientos rápidos con el yoga de escritorio. Con unos sencillos movimientos, puedes mantenerte con energía durante todo el día